El último triunfo del motor Tornado
De la mano de Rubén Luis Di Palma, Torino logró su último triunfo con el motor Tornado. Fue en las trágicas 500 Millas Mercedinas disputadas el 20 de abril de 1975.
Luego de los 5 títulos que logró Torino en 6 campeonatos disputados entre 1967 y 1971, el abrumador dominio de la marca en el Turismo Carretera amainó considerablemente. Desde el torneo 1972 y en las 50 carreras siguientes, la marca logró apenas 4 triunfos, el último fue de Rubén Luis Di Palma, campeón en 1970 y 1971 con el Toro.
Fue en la 2ª fecha del campeonato de 1975 disputada el 20 de abril. El arrecifeño se quedó con la victoria en las “500 Millas Mercedinas”. Haciendo valer la velocidad final que tenía el motor Tornado, el promedio de Di Palma fue de 231,008 km/h.
Di Palma fue el más veloz de aquella primera vuelta de las 3 pactadas al circuito de 152,376 kilómetros, que unía Chivilcoy, Chacabuco, Carmen de Areco y Rawson para volver a Chivilcoy. Pero la bandera roja detuvo anticipadamente la competencia en la 1ª vuelta.
Por aquel entonces, la seguridad en las pruebas de ruta -especialmente en las que tenían tan larga extensión- estaban en el ojo de la tormenta. Y la tragedia que enlutó aquella prueba reavivó el debate.
65 triunfos logró el motor Tornado en el TC. Con 21 victorias, Eduardo Copello fue el más ganador. Luego siguen Luis Rubén Di Palma con 12, Héctor Gradassi y Gastón Perkins con 5 cada uno.
Al paso por el sector en donde se habían situado los boxes -peligrosamente ubicados tras una curva muy rápida- el Chevrolet del debutante Eduardo Rodríguez se descontroló a más de 200 km/h.
Las consecuencias fueron fatales: Rodríguez atropelló y mató a su padre Enrique que lo esperaba, junto con su equipo, en la zona de abastecimiento. También hirió a César Chabert, hermano del piloto Raúl, quien pudo recuperarse satisfactoriamente.
Aquella fue la 14ª y última victoria de Di Palma con Torino (sumó 20 en el TC, 4 con Chevrolet y 1 con Dodge y Ford). En lo que refiere a Torino la marca debió esperar poco más de 28 años para volver a ganar una carrera.
Fue de la mano de Patricio Di Palma quien el 11 de mayo de 2003 en Buenos Aires, venció con un Toro que había comenzado a construir su padre. Ese fue el primer éxito de Torino con el impulsor Cherokee que por entonces había reemplazado al Tornado. Antes, claro, ya había escrito páginas doradas en la historia de la categoría.