Turismo Carretera

TC: el día que los 3 primeros fueron excluidos por Técnica

El 1 de octubre de 1995, Juan María Traverso, Luis Minervino y Osvaldo “Cocho” López completaron el podio en Balcarce. Cuatro días después fueron excluidos por anomalías en la nafta.

Carlos Saiz se dio el gusto de ganar 2 veces en el Turismo Carretera: la 1ª vez fue el 6 de febrero de 1982 en el autódromo de Buenos Aires con un Ford. La 2ª, la concretó 13 años más tarde. Fue el 1 de octubre de 1995 en Balcarce, también con un auto del Óvalo. Lo curioso es que en esta última, el piloto de Burzaco arribó 4°. Pero se benefició porque los 3 primeros fueron excluidos por anomalías en el combustible.

Justamente esa había sido la última competencia –hasta la del sábado pasado en Rafaela- donde al menos 2 de los 3 primeros de la Final recibían una sanción por Técnica posterior a la competencia. Entre una y otra carrera pasaron 25 años, 11 meses y 9 días.

Aquella Final en La Barrosa correspondía a la 12ª fecha del campeonato. Juan María Traverso y Luis Minervino, los 2 mejores representantes de Chevrolet en la temporada, peleaban mano a mano por el título de campeón. Justamente ellos 2 junto a Osvaldo “Cocho” López (Chevrolet) fueron los integrantes del podio excluidos por anomalías en el combustible.

¿Qué había pasado? La Final había quedado en manos de Traverso (era su 1° éxito en Balcarce), seguido por Minervino y López, en un podio a puro Chevrolet. Sin embargo, en el recinto de la Técnica se tomó una muestra de combustible de los 6 autos que habían ocupado las primeras posiciones.

Cuatro días después, el jueves 5 de octubre, se verificó que la nafta que habían utilizado Traverso, Minervino y López no coincidía con la que había provisto la categoría durante ese fin de semana. De ese modo, 4 días después, se le otorgó la victoria a Saiz que terminó escoltado por Omar Martínez (Ford) y José Ciantini (Chevrolet).

Casi 27 años más tarde, el Turismo Carretera se ve envuelto en nuevas polémicas por anomalías técnicas en el Chevrolet de Manu Urcera y el Ford de Nicolás Bonelli, primero y segundo en la carrera santafesina. Con otros protagonistas y en diferentes circunstancias, pero que generan esa sensación de que este es un cuento de nunca acabar.

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