Turismo Carretera

La casa auto del TC

La pasión de Arcadio Ninona por el Turismo Carretera, lo llevó a hacer esta insólita construcción que inmortalizó el Ford ’38 con la que su hijo Héctor fue revelación de Gran Premio de 1958.

Debe haber pocas cosas más extravagantes en el mundo de la arquitectura que la casa-auto de Pergamino. La obra que Arcadio Adone Ninona encargó hacer como una réplica a escala del Ford modelo ’38 con el que su hijo Héctor consiguió el 5° puesto en el Gran Premio de Turismo Carretera de 1958.

De hecho, fue mostrada varios años atrás como una de las 10 casas más originales de mundo en un especial del programa estadounidense Home & Garden Television (hoy conocida como HGTV). Pero la señal de Discovery no fue la única que se vio atraída por esta estructura ubicada en el kilómetro 226 de la ruta nacional N°8, a metros de la Terminal de Ómnibus local.

Fueron varios los medios que reflejaron este curioso “monumento” al Turismo Carretera y que tanta gente visitó (hasta el expresidente Carlos Menem llegó allí acompañado por Rubén Luis Di Palma). Repercusión que en definitiva buscaba Ninona para homenajear al TC e inmortalizar la cupecita con la que su hijo le dio su mayor alegría.

El 29 de julio de 2017 fue declarado Monumento Histórico Nacional del Turismo Carretera, en el marco de distintas acciones que realizó la ACTC como celebración de los 80 años de historia de la categoría.

Mi viejo era un apasionado del automovilismo, pero puntualmente del TC. Él me llevó a competir en autos y disfrutaba mucho más que yo de las carreras… Hacía muchas amistades en las competencias y le fascinaba estar en contacto con los Gálvez y los Emiliozzi. Pero con el que hizo muy buena relación fue con Carlos Menditeguy. Ese era su mundo y su vida…”, contó Héctor Ninona a SoloTC.

Fue inaugurada el 17 de diciembre de 1981, el día del cumpleaños 70 de Arcadio.

A bordo de la cupecita azul, con el N°45 en las puertas, Ninona se convirtió en revelación al terminar por detrás de Juan Gálvez, Marcos Ciani, Oscar Gálvez y Ángel Rienzi en el GP de 1958, año de su debut en la popular categoría.

Y ese suceso deportivo despertó el interés de hacer esta obra faraónica, que en principio ningún arquitecto se animaba a enfrentar y luego ningún constructor quería realizar. Es que no era sencillo hacer el techo con las curvaturas originales del auto, y tener como modelo inspirador sólo una vieja foto amarillenta. Pero luego de muchos planos, intentos e impasses, la casa-auto se inauguró el 17 de diciembre de 1981 -luego de cuatro años de trabajo- en coincidencia con el 70 aniversario de Don Arcadio.

Arcadio y Héctor Ninona. (Archivo: Pablo Perrota)

La casa-auto tiene 40 metros cuadrados de superficie y posee una estructura de mampostería hasta el metro veinte de altura a partir del nivel del piso. Mientras que las curvaturas del techo fueron moldeadas con mucha paciencia para que tenga la misma forma que el auto y está trabajado con un entramado de hierro cruzado, soldado y recubierto con hormigón. Para que las ruedas sean iguales, se usó un molde de madera.

El interior de la casa-auto

Los planos de la famosa casa-auto de Pergamino. (Foto: Gonzalo Giorgi)

Por la puerta del conductor se ingresa al habitáculo que hace de living comedor; y de allí se tiene acceso al motor, donde se encuentra la cocina con vista al exterior a través del radiador frontal; o al baúl, donde está el baño y un dormitorio. Mientras que en las cavidades de las ruedas hay empotrados placares y alacenas, y distintas piezas de autos ambientan este hogar.

Ninona se dio el gusto de vivir allí un año y de ceder la terraza para que las radios relataran para todo el país la Vuelta de Pergamino, ya que está en un lugar privilegiado del “Triángulo chico”. Actualmente hace las veces de museo de automovilismo y de casa quinta familiar.

Héctor Ninona en el TC

El Ford de Ninona en el GP del ’58 donde terminó 5°. (Archivo: Pablo Perrota)

Debutó en Turismo Carretera el 4 de mayo de 1958 en la Vuelta de Río Cuarto, donde a bordo de un Ford consiguió un destacado 8° puesto. En el Gran Premio de ese año arribó en el 5° lugar y ese resultado le dio una gran trascendencia. En tanto que en la Vuelta de Villa Carlos Paz de 1959 fue 2° detrás de Juan Gálvez y ese fue su mejor resultado en la especialidad. Su retiro llegó en 1963, luego de tener una buena actuación en la Vuelta de Pergamino, acumulando 63 presentaciones en el TC.

Monumento Histórico Nacional 

Hugo Mazzacane junto a Héctor Ninona (izquierda del cartel) y Facundo Gil Bicella (derecha) en el acto en el que se declaró Monumento Histórico en julio de 2017. (Foto: Gonzalo Giorgi)

El 29 de julio de 2017 fue declarado Monumento Histórico Nacional del Turismo Carretera por la ACTC, en el marco de distintas acciones que realizó la entidad como celebración de los 80 años de historia de la categoría. En el evento, que tuvo la presencia de la cúpula de la ACTC y de pilotos como Omar Martínez, se reconoció a 13 expilotos locales que participaron en la “máxima”. “Gracias Ninona, por lo que hizo, por lo que ocurrió, porque seguramente cuando hiciste esto no pensaste lo que iba a pasar hoy y quedaste en la historia permanente por esto. Así que el TC te da las gracias y te felicita”, dijo Hugo Mazzacane en aquel acto.

Foto principal: Gonzalo Giorgi

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