Marcos Laborda y las claves del título de Werner en el TC

Un encuentro casual con Marcelo Occhionero en las 24 Horas de Daytona de 2018. Ese fue el punto de inflexión que llevó a que Marcos Laborda (50 años) volviera al Turismo Carretera luego de 10 años y terminara la atípica temporada 2020 siendo el responsable técnico del Ford del campeón Mariano Werner.  

“La idea de Marcelo (Occhionero) era hacer algo similar a lo que hace Penske en el NASCAR, que tiene autos repartidos en distintos equipos”, le contó Laborda a SoloTC, que sin embargo reconoció que al Memo Corse ese esquema de trabajo “no le resultó” con el DTA Racing. La escuadra de Ulises Armellini tuvo en su taller el Ford de Werner en las 5 primeras fechas; luego de la 1ª visita a Buenos Aires se mudó al del Azul Sport Team.

“En nuestro caso, se trataba de buscar proveedores y brindar un asesoramiento: él en la parte comercial y de management y yo, en la técnica. Marcelo me pidió que le diera una mano a Mariano (Werner). Después se fue entusiasmando y las cosas se fueron dando sobre la marcha”, agregó el ingeniero mecánico.   

Una función que ejerció condicionado por su trabajo principal (el TMG Racing del Stock Car de Brasil) y por la pandemia. Por eso, solo pudo estar presente en las 2 primeras fechas del torneo de TC. “No creí conveniente ocupar el cupo de gente que verdaderamente trabajaba sobre el auto. Además, con la tecnología que existe podía tener una muy buena comunicación con Werner”, explicó el técnico azuleño. 

El método de Werner y Laborda

Laborda no trabajaba en el TC desde 2010, cuando asistió al Ford de Ariel Robbiani. Y su anterior experiencia con este tipo de autos había sido en 2015, con el Ford de TC Mouras de Lucas Valle. “Por diferentes circunstancias estaba bastante alejado del TC. Pero no estar empapado en la categoría me permitió ver errores de organización”, puntualizó.

En ese sentido el reconocido técnico con pasado en el equipo Forti de Fórmula 1 indicó que “Werner es capaz de manejarse solo porque es uno de los pilotos que más entiende el funcionamiento del auto. Solo era cuestión de ordenarlo un poco, ayudarlo con la administración de los auspiciantes y los proveedores”. 

Laborda fue más allá y consideró que “exigirles a los proveedores acaso haya sido la clave del título. A veces uno mezcla el amateurismo con el profesionalismo. Y si buscas resultados tenés que dejar de lado el amiguismo. Yo tengo una amistad con Rody Agut y de hecho hemos charlado de esto. Cuando se rompe el motor en San Nicolás, Occhionero empieza a buscar alternativas. Eso hizo que Rody se pusiera las pilas. Y la muestra está en que nunca más tuvimos un problema con el impulsor”. 

Otro de los puntos fuertes de Memo Corse fue la inversión económica con la que se respaldó a Werner. Laborda le detalló a este medio que esa inversión se focalizó en la confiabilidad mecánica, “con la utilización permanente de elementos nuevos y el mantenimiento preventivo. Por ejemplo, en la transmisión, que sufre mucho con la potencia que tiene un TC, y en ciertos componentes del motor, como las bielas, los pistones y el cigüeñal.”

Mariano Werner logró sus 3 triunfos de 2020 una vez que Marcos Laborda quedó como encargado técnico exclusivo del Ford Nº 3. La carrera del 11 de octubre en San Nicolás le significó el regreso a la victoria del ingeniero de Azul, cuyo anterior éxito en el Turismo Carretera había sido el 8 de octubre de 2006 en Nueve de Julio, con el Dodge de José Luis Di Palma (Selles Competición).

El trabajo del fin de semana

Si bien antes de comenzar la temporada 2020 el Memo Corse presentó a Laborda como director deportivo general de su proyecto para TC, a partir de la 3ª fecha se convirtió además en el encargado técnico exclusivo del Ford de Werner. Con la salvedad de que el azuleño estaba en Brasil, imposibilitado de viajar a la Argentina por la pandemia .  

Marcos reveló a SoloTC cómo se diagramó el trabajo del fin de semana con el entrerriano en ese contexto. “Había charlas previas a cada fecha, donde veíamos los datos del auto que él tenía de los 5 años que tuvo su propio equipo. La puesta a punto base funcionó para la mayoría de los circuitos. Solo había que hacer las adaptaciones lógicas a cada uno. Y llevábamos un par de set up alternativos, más que nada para variaciones en las condiciones climáticas y de pista”, detalló. 

Durante el fin de semana, y luego de cada actividad en la pista, Laborda y Werner se comunicaban por teléfono o por Zoom. “Ahí Mariano me pasaba el reporte de las actitudes del auto y él mismo aportaba soluciones. Werner acortaba mucho los caminos por sus conocimientos técnicos y mecánicos”, señaló. Y destacó que “los autos rápidos los hacen los pilotos rápidos en un buen entendimiento con su grupo técnico”.

Laborda expuso que como “al haber tantas fechas seguidas, el tiempo de reacción era fundamental”, pero también puntualizó que “no era un año para hacer grandes cambios en el auto”. Y puso como ejemplo la 1ª visita a Buenos Aires. “Tuvimos problemas con la velocidad de punta por la configuración aerodinámica que habíamos elegido. Pero estábamos entre los 5 primeros y no valía la pena cambiar por cambiar”, añadió.

Sin trabajo en Argentina 

“Hoy por hoy no estoy haciendo nada en TC. El año pasado yo ya estaba complicado para trabajar en Argentina”, dijo el ingeniero, que este año fue contratado por un segundo equipo de Stock Car, el laureado RC Competições. 

De todos modos, el vínculo de Laborda con Werner -hoy en el Gurí Martínez Competición- se mantiene. “Con Mariano hablamos casi todas las semanas. Me consulta alguna duda que pueda llegar a tener, pero él la tiene muy clara”, aseveró Laborda. 

El ingeniero tampoco trabaja más en el Ford de Marcos Castro, que se alista en el taller que el Memo Corse armó en Necochea. “Le di una mano para la 1ª fecha del TC Pista (N. de la R.: logró la pole position en La Plata) porque queríamos demostrar que era el verdadero Ford de Werner. Porque a veces cuando se compra un auto no es exactamente el mismo que se pensaba… Luego de la carrera de La Plata, Castro tomó su propio camino”, concluyó Laborda.