Por qué Giallombardo adaptó el Ford de TC
Mauro Giallombardo mostró las adaptaciones que le realizó a su Ford con el objetivo de comenzar su rehabilitación física en las pistas. La Rana le había dicho a SoloTC que quería volver a competir de manera profesional.
Mauro Giallombardo dio otro paso más en su objetivo de comenzar a realizar parte de la rehabilitación física –que viene haciendo desde hace más de 4 años- arriba de un auto de Turismo Carretera. La Rana mostró en sus redes sociales las adaptaciones que le está realizando a su Ford en el taller de su equipo.
Para ello, Giallombardo importó una caja con levas al volante como la que utiliza en su simulador. Mauro explicó que la hizo instalar del lado izquierdo del volante debido a las secuelas que le quedaron del grave accidente vial que sufrió el 13 de agosto del 2017 en Villa La Angostura.
El campeón 2012 de la “máxima” detalló que una de las consecuencias del fuerte traumatismo encéfalo craneano que sufrió en aquel accidente fue una hemiparesia en el lado derecho de su cuerpo que le genera una marcada debilidad en su brazo.
En principio, una vez que el Ford esté terminado, la idea es conducirlo en eventos organizados por sus auspiciantes y así poder financiar el costo de las reformas que lleva a cabo en el coche. Y a partir de allí evaluar si está en condiciones físicas para soñar con un posible retorno a las pistas de manera oficial.
“Me propuse que si vuelvo es para ser campeón de todas las categorías de la ACTC. Y para alcanzar eso solo me quedan el título de TC Pista Mouras y el de TC Pick Up, que antes no estaban. Esa es mi motivación para volver a correr y en cuanto pueda organizarme voy a hacerlo”, le había dicho a SoloTC en una nota publicada en febrero de este año.
Por supuesto que esta idea también está supeditada a lo que decida la dirigencia y el departamento médico de la ACTC. En este aspecto, Mauro adelantó que tiene pensado reunirse en breve con Hugo Mazzacane y el doctor Rodolfo Balinotti.
Cabe recordar que Giallombardo no se sube a un auto de competición desde el 6 de agosto del 2017 cuando disputó la 1ª edición de los 1000K de Buenos Aires. Siete días después, el auto que manejaba en la ruta Nº40 chocó de frente contra un colectivo de larga distancia.
Producto de fuertísimo impacto, Giallombardo permaneció 1 mes en coma y más tarde debió atravesar una larga recuperación de poco más de 1 año y medio en el Instituto Fleni de Escobar para realizar su recuperación neurológica.