El permiso especial que habilitó a Craparo a probar en plena Copa de Oro
El piloto de Chacabuco recibió una autorización excepcional de la ACTC para realizar un ensayo con su Dodge Challenger en La Plata. El motivo detrás de la habilitación y los detalles de una prueba clave para el futuro del piloto en la "máxima".
A pesar de la veda de pruebas que rige para el Turismo Carretera durante el período de la Copa de Oro, Elio Craparo (27 años) recibió una autorización especial de la ACTC para realizar un ensayo clave en el autódromo de La Plata. El piloto de Chacabuco, que compite con un Dodge Challenger del Hermanos Álvarez Motor Motorsports, pudo así recuperar la jornada que había tenido que suspender un mes atrás debido a los daños que sufrió su auto en el fuerte accidente de Buenos Aires.
Una prueba clave para entender el Challenger
Se trató del único ensayo de Elio en la temporada, por lo que era fundamental para el equipo poder profundizar el conocimiento del auto de nueva generación, algo que el equipo no había podido hacer en una evaluación completa hasta ahora.
“Necesitábamos una prueba para conocer más en profundidad el auto, ya que nunca habíamos hecho una evaluación completa. Hicimos muchas mediciones y trabajamos en conseguir un equilibrio del Challenger –le contó Craparo a la ACTC y agregó–. Primero probamos en el kilómetro durante dos horas y media aproximadamente y después hicimos pista. Allí también quedamos conformes con un tiempo de 1m21s8 con las gomas que utilizamos en el entrenamiento de San Luis. El balance que hacemos es bueno y pudimos llevarnos mucha información para el taller. Ojalá lo realizado en el ensayo lo podamos aprovechar en San Nicolás”.
El accidente que cambió los planes
Este permiso especial de la ACTC se fundamenta en los hechos ocurridos durante la 10ª fecha en Buenos Aires, que cerró la Etapa Regular. Allí, Craparo fue un gran protagonista y estuvo cerca incluso de lograr su 1ª victoria en la “máxima” (dominó la carrera hasta la vuelta 22 de 25), pero la rotura de un neumático sobre el final le arrebató la chance de lograr su 2° podio en la categoría.
A raíz del pinchazo, el Dodge salió despedido a gran velocidad contra las contenciones e impactó fuerte en el sector de la “S” del Ciervo. El equipo debió trabajar intensamente para reparar los importantes daños y llegar con lo justo a la carrera de San Luis, que marcó el inicio de la Copa de Oro.
El reglamento estipula que durante esta instancia no se pueden realizar ensayos. Sin embargo, la ACTC consideró la situación de Craparo y le otorgó la habilitación. Este ensayo, además, fue crucial para que el equipo pudiera trabajar sobre el nuevo retoque reglamentario para la marca, que desde la fecha puntana cuenta con un splitter 20 milímetros más grande para mejorar la carga aerodinámica.