El TC salió a la calle y dejó su huella en Buenos Aires
En la previa de la definición de la Etapa Regular en el Autódromo Oscar y Juan Gálvez, los coches del Turismo Carretera transitaron la Avenida Libertador. Te mostramos cómo fue el evento que invadió las calles porteñas con el espíritu teceísta.

El Turismo Carretera salió a la calle y dejó su huella en Buenos Aires, en el marco del Gran Premio Shell V-Power, correspondiente a la 10ª fecha del campeonato. Los autos de la “máxima” recorrieron en caravana la Avenida Libertador, en un evento único que acercó la pasión de la categoría al público porteño, justo antes de la definición de la Etapa Regular.
La competencia del fin de semana en el autódromo Oscar y Juan Gálvez marcará el cierre de la Etapa Regular, y la caravana sirvió como antesala para que los fanáticos vivieran de cerca la emoción que se avecina: tras la bandera a cuadros del domingo, quedará conformado el “grupo de los 12”, los pilotos que ingresarán a la Copa de Oro RUS para luchar por el título a partir de la próxima fecha en San Luis.
El TC en el corazón de la Ciudad
La acción comenzó a las 14:00 horas, cuando los vehículos partieron desde la intersección de Figueroa Alcorta y Tagle. El recorrido siguió por la Avenida Libertador hasta la calle Cerrito, con custodia de la Policía de la Ciudad y agentes de tránsito para garantizar la seguridad de pilotos y público. La caravana culminó en la estación de servicio Shell ubicada en esa esquina, donde se llevó a cabo una conferencia de prensa.

Ídolos al alcance de la mano
Previo a la caravana, los fanáticos pudieron acercarse a los autos y llevarse un recuerdo de sus pilotos favoritos. Desde las 11:00 horas, en la sede de la TV Pública, se desarrolló la exposición de vehículos y la firma de autógrafos. Allí estuvieron Julián Santero (Ford Mustang), Jonatan Castellano (Dodge Challenger), Juan José Ebarlín (Chevrolet Camaro), Nicolás Impiombato (Chevrolet Camaro), Nicanor Santilli Pazos (Ford de TC Pista), Tomás Abdala (Ford de TC Pista). Además de contar con la presencia de Marcos Di Palma, que hizo trompos con la Chevy para el delirio de los fanáticos.
