Agustín Canapino y sus 5 títulos en el TC: así construyó su leyenda
Agustín Canapino se consagró campeón de Turismo Carretera por 5ª vez y alcanzó un récord histórico en el automovilismo argentino. Repasamos, una por una, todas sus coronas en la "máxima".
Agustín Canapino (35 años) escribió una nueva página dorada en la historia del Turismo Carretera. El piloto del Canning Motorsport se aseguró su 5º título en la “máxima” este domingo, tras la disputa de la 1ª serie, donde la diferencia de puntos se volvió inalcanzable para sus perseguidores.
Con esta consagración, el Titán no solo iguala la línea de Oscar Gálvez en el TC, sino que se convierte en el máximo campeón del automovilismo nacional con 17 títulos, superando a Juan María Traverso. A continuación, en SoloTC, repasamos las 5 definiciones que lo llevaron a la gloria.
2010: El campeón más joven de la historia
Agustín logró su 1º título en 2010 en una épica definición con Mariano Werner. Ambos llegaron a la última fecha del torneo en el “Gálvez” de Buenos Aires con una premisa clara: ganar para ser campeón.

Werner era el líder de la Copa de Oro con 80 puntos, seguido por el arrecifeño con 64. Sin embargo, Canapino largó 1º en la Final y Werner partió 4º. Aunque el entrerriano se pegó a la cola de la Chevy, Agustín aguantó la presión interna y externa, logró la victoria y se convirtió en el piloto más joven de la historia del TC con 20 años.
Werner fue quien más puntos sumó en el minitorneo, pero no cumplió con el requisito reglamentario de la victoria.

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2017: Una definición para el infarto
A la última fecha llegaron 8 pilotos con chances. Facundo Ardusso (Torino) era el líder y Canapino necesitaba una carambola de resultados: debía avanzar hasta el 4º puesto y esperar que el Flaco se cayera en el clasificador.
En la vuelta 14ª, Agustín superó a Manu Urcera y, vueltas más tarde, se benefició de una sanción a Mauricio Lambiris. —En ese momento Agustín me preguntó por radio cuántos puestos le faltaban para ser campeón. Lo noté muy tranquilo, ahí me di cuenta que el título era posible— contó su papá, Alberto Canapino.

Faltando apenas una vuelta, Agustín marchaba 5º y todavía no le alcanzaba. Tenía por delante al Torino de Alan Ruggiero. En los últimos metros, Canapino se tiró por adentro, los autos se rozaron puerta con puerta en una fricción al límite, y el arrecifeño capturó el 4º puesto necesario.
Cruzó la meta y se consagró campeón por la ínfima diferencia de 0,25 puntos sobre Ardusso, quien finalizó 10º. Una definición de película que agigantó, aún más, su leyenda en la categoría.

2018: La estrategia bajo el diluvio
Si la definición de 2017 fue cardíaca, la de 2018 en San Nicolás tuvo tintes cinematográficos. Agustín llegaba a la última fecha con chances, pero un toque con Manu Urcera en la 3ª serie pareció sentenciar su suerte: quedó relegado a largar la Final desde el puesto 39º. Con Matías Rossi (Ford), Facundo Ardusso (Torino) y Jonatan Castellano (Dodge) largando adelante, el título parecía una utopía.
Sin embargo, el clima jugó su carta. Minutos antes de la largada, el cielo se oscureció. Mientras la mayoría de los equipos dudaba, en el box de Canapino se tomó una decisión clave. Alberto Canapino, tras analizar obsesivamente los radares y el movimiento de las nubes, le dijo a su hijo: “Perdido por perdido, vamos con la puesta a punto de lluvia”.

Cuando se desató el diluvio en la vuelta previa, el caos se apoderó de la grilla. Los candidatos (Rossi, Ardusso y Castellano) debieron entrar a boxes a cambiar neumáticos, perdiendo sus lugares de privilegio. Canapino, que ya estaba listo para el agua, comenzó una remontada feroz desde el fondo.
El Chevrolet Nº1 avanzaba mientras sus rivales penaban en el pelotón. La carrera fue ganada por Alan Ruggiero (Torino), pero el golpe de escena final llegó cuando Emanuel Moriatis (Ford), que marchaba 2º, se despistó tras un roce. Canapino heredó esa posición, cruzó la meta como escolta y se aseguró su 3ª Copa de Oro (la segunda consecutiva) por una diferencia de 3,25 puntos sobre Rossi.

2019: La contundencia del líder
A diferencia de las tres consagraciones anteriores, donde siempre corrió de atrás, en 2019 Agustín llegó a la definición en Neuquén como líder y máximo candidato. Su Copa de Oro había sido demoledora: logró victorias en Rafaela y San Nicolás, y un 2º puesto en Toay, promediando 38,4 puntos por fecha, una cifra muy superior a lo que había mostrado en la Etapa Regular.
Sin embargo, la tranquilidad se esfumó apenas se apagó el semáforo en la final. Valentín Aguirre (Dodge), su único rival directo, realizó una largada fenomenal y saltó a la punta de la carrera. En ese instante, con Canapino ubicado en el 10º lugar y con un auto que no mostraba la contundencia de fechas pasadas, el campeonato cambiaba de manos virtualmente a favor del arrecifeño de Dodge. Agustín estaba obligado a avanzar hasta el 7º puesto para retener la corona.

El golpe de escena que definió la historia ocurrió en la 5ª vuelta, durante un relanzamiento. Una falla eléctrica en el semáforo generó confusión: Aguirre no vio la bandera verde agitando y no aceleró a tiempo, creyendo que la carrera seguía neutralizada. Eso le hizo perder varias posiciones y, con ello, sus aspiraciones al título.
A partir de ahí, el Titán recuperó el aliento y la calma. Con el paso de las vueltas, avanzó con oficio hasta el 4º puesto final. Así selló su tetracampeonato con una ventaja de 14,25 puntos sobre Aguirre, la mayor diferencia numérica lograda en todas sus consagraciones hasta ese momento.

2025: El récord histórico
La consagración anticipada confirma un dominio absoluto en este 2025. —Estoy sin palabras. Se lo dedico a mi viejo, que estuvo conmigo todo este tiempo— dijo un emocionado Canapino apenas se bajó del auto.
Con la obtención de esta Copa de Oro, Agustín alcanzó su 17º título en el automovilismo argentino (sumando el de Turismo Carretera 2000 obtenido la semana anterior), convirtiéndose en el piloto más laureado del ámbito local y dejando atrás la marca de 16 campeonatos del Flaco Traverso.
—Gracias al Canning Motorsport y a Martín Costanzo porque formamos un equipo hermoso. Yo solo soñaba con correr una carrera y hoy logré mi 5° título de TC— cerró el flamante quíntuple campeón.
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